Más de 1500 trabajadoras sexuales de la tercera edad laboran en vía pública y sus clientes abusan de ellas

Más de 1500 trabajadoras sexuales de la tercera edad laboran en vía pública y sus clientes abusan de ellas

La presidenta de la Brigada Callejera de Apoyo a la Mujer, aseguró que la pandemia precarizó la situación de las trabajadoras sexuales independientes, disminuyendo sus ingresos hasta en un 70%

Patricia Carrasco

De las 15 mil 200 trabajadoras sexuales que laboran en la vía pública el 10 por ciento son adultas mayores, abuelas que viven en condiciones muy precarias”, alertó la organización civil Brigada Callejera de Apoyo a la Mujer E.M, A.C.

En el marco del día de los abuelos, Elvira Madrid, presidenta de la organización, describió que las trabajadoras sexuales adultas mayores se han empobrecido a un 100% tras la pandemia.

En esta población la salud se ha visto severamente afectada, incluso registran un crecimiento en casos positivos a infecciones de transmisión sexual y VIH.

Manifestó que las trabajadoras sexuales adultas mayores, se enfrentan a una complicada realidad, debido a que sus ingresos son menores a medida que su edad es mayor.

Madrid resaltó el abuso económico por parte de los clientes a las trabajadoras sexuales adultas mayores es una constante, debido a que ellas se ocupan muy pocas veces, los clientes buscan ofrecerles menos dinero de lo que cobran por sus servicios o les llegan a ofrecer más dinero por realizar el servicio sin condón, la necesidad económica ha llevado a varias de ellas a acceder, aunque esa práctica pone en riesgo su salud.

La presidenta de la Brigada Callejera de Apoyo a la Mujer, aseguró que la pandemia precarizó la situación de las trabajadoras sexuales independientes, disminuyendo sus ingresos hasta en un 70%.

Antes de la pandemia la organización estima que había 7 mil 700 trabajadoras sexuales ofreciendo sus servicios en la vía pública, ahora se estima que hay más de 15 mil.

El conteo, añadió, es parte de un diagnóstico que implementó la Brigada Callejera y, de la cifra total, la organización estima que el 40% son mujeres que habían dejado el trabajo sexual, pero han tenido que regresar a las calles; otro 40% son mujeres que iniciaron a raíz de la crisis; y el 20% restante representa a las que no están en un punto específico, es decir, caminan en vía pública buscando clientes.

La Brigada Callejera ha documentado que del ingreso que perciben las trabajadoras sexuales dependen entre 4 y 5 personas y en su mayoría las trabajadoras sexuales son cabeza de familia, expuso.

Además, un 75% de quienes ejercen son mujeres y un 20% pertenecen a la comunidad de mujeres transgénero y 5% son hombres.